Un camino peatonal con tramos amurallados en piedra que referencian data de la época prehispánica, la demarcación del camino con muros de piedra le dan gran belleza paisajística. El camino viejo entre Pasto y El Tambo, es actualmente el sendero que une la vereda de Villa María y la Vereda el Rosal por más de 4 kilómetros. En su entorno se hallan petroglifos con simbología del pueblo Quillasinga.